Yogur Griego. Receta fácil y rápida

1.- Para elaborar nuestro yogur griego casero comenzaremos por poner a calentar la leche en un cazo. Se trata de leche entera normal.

2.- Añade la nata. En este caso debe ser nata para montar, con un 35% de materia grasa. La nata para cocinar, que tiene menos grasa, no sería adecuada para esta receta.

3.- Ayúdate del termómetro para llevar la mezcla de leche y nata a la temperatura adecuada. En este caso, no debe pasar de 40ºC.

4.- Añade un yogur entero natural. De aquí sacaremos el fermento que nos permitirá hacer nuestros yogures.

5.- Mezcla todo bien y tapa la olla. Calienta el horno hasta que llegue a los 50º y apágalo. Introduce entonces la olla con la leche en el horno apagado y deja que repose, como mínimo, 8 horas.

6.- Una vez pasadas las 8 horas (12 en mi caso), el yogur tiene la consistencia perfecta. Ahora debes colarlo para quitar el suero.

7.- Coloca un colador grande en un bol y cúbrelo con una gasa especial para filtrar. Vierte en ella el yogur y tapa con otra gasa, dejando que repose y vaya soltando el suero.

8.- Aquí puedes ver el suero que hemos obtenido tras filtrar el yogur durante 45 minutos. No lo tires, porque te servirá para otras recetas.

9.- Envasa el yogur en un tarro grande con tapa, de manera que puedas cerrarlo tras cada servicio.

10.- Sírvelo en vasitos individuales y conserva bien cerrado en la nevera. Si tienes tarritos individuales con tapa, puedes guardar el yogur directamente en ellos.